lunes, 13 de abril de 2009

VIGILIA PASCUAL EN EL MONASTERIO


El sábado santo a partir de las 10:30 de la noche, se celebró con la solemnidad que merece, la "noche santa" en el Monasterio de Gradefes.
Como cada año, la comunidad monástica pone todo su empeño y fervor para que esta liturgia sea especial. Pasaré a relataros brevemente en qué consiste.

A la entrada cada uno recoge su vela y se va colocando en los bancos dentro del coro.
Seguidamente el sacerdote explica en qué va a consistir la pequeña procesión en la que primero salen las monjas en fila de a dos, después el pueblo colocado de la misma forma y cierran los sacerdotes. Todo con el máximo silencio posible.

Atravesamos el clausto en la oscuridad de la noche y nos encaminamos hacia el lugar donde está hecha la hoguera, que este año ha sido en el pequeño huerto medicinal. Allí todos alrededor del fuego escuchamos al sacerdote que del fuego enciende los dos cirios pascuales de tamaño gigante y se dirige al claustro. Uno a uno, primero las monjas y después el pueblo, encendemos nuestras velas directamente del cirio y continuamos en pequeña procesión hacia el interior del coro. Este momento es realmente mágico, personalmente es el que más me gusta de toda la ceremonia.

Después de las bendiciones pertinentes comienzan las lecturas y el canto de los salmos acompañados siempre por el órgano que tocan las hermanas. Las voces transparentes de las monjas en las lecturas y el cántico de los salmos son momentos muy especiales . Se leen lecturas como el génesis, la liberación de Israel etc. y el pueblo participa activamente. Una lectura a cargo de una hermana y la siguiente a cargo de una vecina o vecino.

Finalizan las lecturas y el sacerdote vuelve a encender las velas. Ahora pasando entre unos y otros volvemos a encenderlas todas y comienza la bendición de los cirios pascuales que el sacerdote introduce por tres veces dentro del agua bendita. Sigue el rito y la tradición ancestral. Parece que estamos en otro mundo inquietante y muy tranquilo.

A partir de ahí se convierte en una celebración de una misa convencional. Se hace un poco largo al final, pero creedme..... merece la pena disfrutarlo, aunque sea alguna vez!!!!

Ahh... el cirio de la fotografía fue decorado a mano por las monjas. Bonito verdad???
Un saludo a todos y Felices Pascuas!!!

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